cuesta aceptar el cambio radical que dara mi vida. Estoy a un día de
apagar una decima quinta vela, a un día de comenzar una nueva
etapa, a un día de poder decir: tengo 15 años. Pero.. ¿Qué si no me
siento lista?, el momento que tanto espere aún no tiene la perfección
con la cual lo soñaba, entonces entre ayer y hoy una avalancha de
recuerdos me bombardean, algunos me duelen, me llevan a la cumbre
de la melancolía, para que otros entre risas me dejen bajar, creando
así la hermosa ilusión de que todo sea tal cual lo imagine, hace diez
años cuando festejaba los quince de mis muñecas y le contaba a mi
mamá todo lo que quería para esta fecha. Lo que duele hoy es
pasado, el día de hoy solo quiero sentirme lista, quiero que un nuevo
sol me saque la más hermosa de las sonrisas, quiero que mi infancia y mi adolescencia se den la mano, quiero que en aquel instante en el
que nací sea mañana el que me haga feliz, quiero festejar seguir
existiendo pese a todo, quiero olvidar mis errores y amar mi
presente, quiero, quiero, pero más aún siento, siento la absoluta
necesidad de comenzar esta nueva etapa y ser feliz.
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